Un poco cansado de que mois comentarios no aparezcan en el periódico, pongo aquí el que acabo de enviarles. A partir de ahora, si me acuerdo, lo haré siempre así:
"En Marzo de 2010 Esperanza Aguirre, presidenta de la Comunidad de Madrid, llamó a los ciudadanos a la REBELIÓN contra Zapatero por su subida del IVA. No es el único caso en el PP, al que aquí no se menciona, sino el que ahora mismo me viene a la memoria. Pero el articulista prefiere contar las cosas, digamos, a su modo".
Mire, A.Nónimo, que en el mismo artículo (¡en el mismo!) denuncio la hipocresía moral que supone no luchar con las mismas fuerzas contra el abortista PP que contra el abortista PSOE. Pero usted, erre que erre, con su prejuicio.
Ignoro si tengo prejuicios, aunque me temo que no el que el articulista me atribuye. Dice en él, cito: "declaración de Ada Colau: "Vamos a desobedecer las leyes que nos parezcan injustas". Lo mismo respeto a la Generalitat. Al PP ni le menciona, aunque es cierto que habla de "la derecha". (¿Le recuerdo que en una polémica anterior afirmó usted que el PP no es de derecha, sino de centro? Luego, si es coherente, no debe ser a él a quien alude, ni siquiera ahí, donde en todo caso no habla específicamente -como sí respecto a los otros- de desobediencia a las leyes).
También dice que, vuelvo a citar, que "si uno piensa que una ley es injusta, sea o no constitucional, debe desobedecerla. Mediante la objeción de conciencia, que es el deber último de cada ciudadano, sea alcaldable o no". No es eso, evidentemente, lo que sucedió en el caso de Aguirre que ponía como ejemplo.
En resumen: critica usted a Ada Colau por decir que "vamos a desobedecer las leyes que nos parezcan injustas". Dónde se diga en el artículo que la derecha, perdón, el centro -el PP, entiéndase, que con tanta movilidad acabará uno por no aclararse-, merece exactamente la misma crítica, por haber dicho (y hecho, o intentado hacer) exactamente lo mismo, reconozco que no lo veo. ¿De veras cree usted que quien ignore o haya olvidado esas actitudes del PP puede leerlas en su artículo?
Y conste que yo no le atribuyo "prejuicios": creo que lo justo es que las propias palabras de cada uno le sitúen, sin necesidad de añadirles calificativos tan ociosos como poco justificados.
Me encanta darle la razón a mis tertulianos, aunque usted me lo pone francamente difícil. Por ejemplo, no ha visto que mi artículo es una defensa de Colau contra los que se escandalizan a buenas horas mangas verdes, etc. Pero sí tiene razón en que uso disémicamente "la derecha". Supongo que no le valdrá mi excusa de que en este artículo está usada así porque es el hecho de que la gente piensa que gobierna la derecha (aunque sea el centro, en efecto, dsiculpe) lo que hace que borren las protestas escandlizadas de su agenda política. Espero ser más preciso en próximas ocasiones, aunque ya sabe usted que la polisemia es la sal de la escritura.
Como ya dije en el comentario a otra noticia, lo de "la derecha" (o "la izquierda") depende de dónde se sitúe uno. Un ejemplo: si alguien habla de Vigo situándolo el sur, es cosa que puede extrañar. Pero si quien lo hace vive en La Coruña, no hay duda de que, desde su personal punto de vista, tiene razón, aunque para aplicar ese punto de vista a la entera realidad española se precise una corrección de un buen montón de grados. Aquí pasa lo mismo; casi todo le queda más allá en dirección a la izquierda, pero eso se debe a lo muy a la derecha que se sitúa usted.
Según lo que dice, la derecha no tiene actualmente representación alguna ni en el Congreso ni en el Senado, ampliamente dominados por lo que llama "el centro" y, más secundariamente, por la izquierda. Lo que según usted es la derecha no reúne en todo el territorio nacional más que unos pocos miles de votos, insuficientes para tener la más minima representación a nivel del Estado. El problema es que ese punto de vista suyo sólo será compartido por quienes, como usted mismo, apoyan a alguna opción situada más a la derecha que el propio PP: lo que la inmensa mayoría de la población llamaría "extrema derecha".
Sólo hay, pues, que corregir lo que usted diga, y sustituir mentalmente "centro" por "derecha", y "derecha" por "extrema derecha", para que su lenguaje sea el de (casi) todos. Y comprender que, desde su punto de vista, la "verdadera" derecha es, hoy por hoy, puramente residual, y mucho más cerca, por tanto, de la desaparición o la fusión con otras fuerzas de lo que lo está el PSOE, a quien usted en cambio, con una notable impermeabilidad a lo real, atribuía esos riesgos. En otros términos, comprender que usted habla no de la realidad tal como todos podemos verla, sino de la que usted preferiría que existiese.
Y eso aunque, en la entrada de que tomé aquellas referencias (en este mismo "Trampolínk", 29-1-12) , dijese usted que "si es pensamiento desiderativo, no me vale". La realidad, como puede verse, es que, al menos en estos temas, apenas utiliza otro.
Bien, cada uno puede llamarse como guste. Juzgue el lector, si alguno tenemos, si reconociendo que tengo razón es más ajustado y explicativo el término que yo le aplico o el que usted mismo prefiere.
Un poco cansado de que mois comentarios no aparezcan en el periódico, pongo aquí el que acabo de enviarles. A partir de ahora, si me acuerdo, lo haré siempre así:
ResponderEliminar"En Marzo de 2010 Esperanza Aguirre, presidenta de la Comunidad de Madrid, llamó a los ciudadanos a la REBELIÓN contra Zapatero por su subida del IVA. No es el único caso en el PP, al que aquí no se menciona, sino el que ahora mismo me viene a la memoria. Pero el articulista prefiere contar las cosas, digamos, a su modo".
Mire, A.Nónimo, que en el mismo artículo (¡en el mismo!) denuncio la hipocresía moral que supone no luchar con las mismas fuerzas contra el abortista PP que contra el abortista PSOE. Pero usted, erre que erre, con su prejuicio.
ResponderEliminarIgnoro si tengo prejuicios, aunque me temo que no el que el articulista me atribuye. Dice en él, cito: "declaración de Ada Colau: "Vamos a desobedecer las leyes que nos parezcan injustas". Lo mismo respeto a la Generalitat. Al PP ni le menciona, aunque es cierto que habla de "la derecha". (¿Le recuerdo que en una polémica anterior afirmó usted que el PP no es de derecha, sino de centro? Luego, si es coherente, no debe ser a él a quien alude, ni siquiera ahí, donde en todo caso no habla específicamente -como sí respecto a los otros- de desobediencia a las leyes).
ResponderEliminarTambién dice que, vuelvo a citar, que "si uno piensa que una ley es injusta, sea o no constitucional, debe desobedecerla. Mediante la objeción de conciencia, que es el deber último de cada ciudadano, sea alcaldable o no". No es eso, evidentemente, lo que sucedió en el caso de Aguirre que ponía como ejemplo.
En resumen: critica usted a Ada Colau por decir que "vamos a desobedecer las leyes que nos parezcan injustas". Dónde se diga en el artículo que la derecha, perdón, el centro -el PP, entiéndase, que con tanta movilidad acabará uno por no aclararse-, merece exactamente la misma crítica, por haber dicho (y hecho, o intentado hacer) exactamente lo mismo, reconozco que no lo veo. ¿De veras cree usted que quien ignore o haya olvidado esas actitudes del PP puede leerlas en su artículo?
Y conste que yo no le atribuyo "prejuicios": creo que lo justo es que las propias palabras de cada uno le sitúen, sin necesidad de añadirles calificativos tan ociosos como poco justificados.
Me encanta darle la razón a mis tertulianos, aunque usted me lo pone francamente difícil. Por ejemplo, no ha visto que mi artículo es una defensa de Colau contra los que se escandalizan a buenas horas mangas verdes, etc. Pero sí tiene razón en que uso disémicamente "la derecha". Supongo que no le valdrá mi excusa de que en este artículo está usada así porque es el hecho de que la gente piensa que gobierna la derecha (aunque sea el centro, en efecto, dsiculpe) lo que hace que borren las protestas escandlizadas de su agenda política. Espero ser más preciso en próximas ocasiones, aunque ya sabe usted que la polisemia es la sal de la escritura.
ResponderEliminarComo ya dije en el comentario a otra noticia, lo de "la derecha" (o "la izquierda") depende de dónde se sitúe uno. Un ejemplo: si alguien habla de Vigo situándolo el sur, es cosa que puede extrañar. Pero si quien lo hace vive en La Coruña, no hay duda de que, desde su personal punto de vista, tiene razón, aunque para aplicar ese punto de vista a la entera realidad española se precise una corrección de un buen montón de grados. Aquí pasa lo mismo; casi todo le queda más allá en dirección a la izquierda, pero eso se debe a lo muy a la derecha que se sitúa usted.
ResponderEliminarSegún lo que dice, la derecha no tiene actualmente representación alguna ni en el Congreso ni en el Senado, ampliamente dominados por lo que llama "el centro" y, más secundariamente, por la izquierda. Lo que según usted es la derecha no reúne en todo el territorio nacional más que unos pocos miles de votos, insuficientes para tener la más minima representación a nivel del Estado. El problema es que ese punto de vista suyo sólo será compartido por quienes, como usted mismo, apoyan a alguna opción situada más a la derecha que el propio PP: lo que la inmensa mayoría de la población llamaría "extrema derecha".
Sólo hay, pues, que corregir lo que usted diga, y sustituir mentalmente "centro" por "derecha", y "derecha" por "extrema derecha", para que su lenguaje sea el de (casi) todos. Y comprender que, desde su punto de vista, la "verdadera" derecha es, hoy por hoy, puramente residual, y mucho más cerca, por tanto, de la desaparición o la fusión con otras fuerzas de lo que lo está el PSOE, a quien usted en cambio, con una notable impermeabilidad a lo real, atribuía esos riesgos. En otros términos, comprender que usted habla no de la realidad tal como todos podemos verla, sino de la que usted preferiría que existiese.
Y eso aunque, en la entrada de que tomé aquellas referencias (en este mismo "Trampolínk", 29-1-12) , dijese usted que "si es pensamiento desiderativo, no me vale". La realidad, como puede verse, es que, al menos en estos temas, apenas utiliza otro.
Estoy de acuerdo con usted. Salvo que yo no soy de extrema derecha, sino güelfo. Blanco, para más señas.
ResponderEliminarBien, cada uno puede llamarse como guste. Juzgue el lector, si alguno tenemos, si reconociendo que tengo razón es más ajustado y explicativo el término que yo le aplico o el que usted mismo prefiere.
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